David Oslé, psicólogo infanto-juvenil de FMLC
Seguramente muchos habéis visto u oído hablar sobre Bluey, una serie de animación protagonizada por una familia de perros que vive en Australia. A pesar de ser una serie de dibujos para niños, en este artículo queremos hablar de ella porque suele acertar en su manera de ilustrar la realidad de lo que vivimos.
En concreto, en el capítulo 38 de la primera temporada, hablan del procesamiento que los niños hacen de la muerte: Bluey, una perrita de cinco años, se encuentra con un pajarito que se ha caído de un árbol mientras pasea con su padre. Juntos llevan al pajarito al veterinario, donde les dicen que no han podido salvarlo y se ha muerto. En ese momento, Bluey se pone muy triste y su padre la abraza y la acoge.
En el camino de vuelta a casa, Bluey le pregunta a su padre si el pajarito se va a poner bien. Esto puede chocar, porque acaban de decirle que el pajarito se había muerto. ¿Por qué pregunta si se va a poner bien? ¿Es que acaso no ha entendido lo que significa morirse? Probablemente se haya enterado… hasta donde ha podido. Como ya hemos explicado en artículos anteriores, los niños y niñas van entendiendo qué es la muerte poco a poco, no aprehenden el concepto entero al mismo tiempo. En este caso, Bluey parece tener problemas para comprender que la muerte supone el final de la vida.
La dificultad infantil para entender la muerte
Los y las menores no entienden bien todo a la primera. Si tenemos que recordarles repetidamente la utilidad de lavarse los dientes, o explicarles por qué tienen que ir al colegio o al instituto numerosas veces a lo largo de su vida, ¿cómo vamos a hablar con ellos de la muerte solo una vez? ¡Es mucho más complicado de entender! Las conversaciones más importantes con niños y niñas son las que tenemos que mantener a lo largo de su vida, no una única vez. No sólo porque no lo entiendan bien al principio, sino porque su perspectiva sobre el tema va a ir cambiando con el paso del tiempo.
El capítulo continúa y Bluey llega a casa, donde inmediatamente se pone a jugar recreando su día: cómo se encuentra al pajarito, cómo lo llevan al veterinario y cómo termina muriendo. Este es otro detalle importante: mientras que los adultos tenemos un procesamiento mucho más verbal de lo que nos pasa (por ejemplo, cuando algo nos afecta tratamos de desahogarnos con amigos o familia), en los niños este procesamiento es a través del juego. Básicamente recrean la situación que les ha afectado en un entorno seguro y manejable. En el juego pueden alterar el resultado, pueden alterar su reacción, pueden alterar cualquier cosa que les facilite la integración de aquello que ha sucedido.
El duelo infantil es diferente
A menudo, cuando abordamos el duelo en niños o niñas de corta edad, nos encontramos con numerosas consultas de padres y madres relacionadas con que sus hijos e hijas “no hablan de la muerte”. Desde una perspectiva adulta, esto puede llegar a ser un problema porque, recordemos, los adultos tenemos un procesamiento más verbal (“necesitamos hablarlo”).
No obstante, puede ser que ese niño o niña que no esté hablando de una pérdida que le afecta, no lo haga sencillamente porque no lo necesita. Puede ser que no esté expresando su dolor o sus emociones con palabras, pero sí a través del juego: quizá en sus juegos aparezcan personajes muriéndose y los demás personajes reaccionen, quizá sean juegos más agresivos que canalicen la rabia, o juegos en los que ningún personaje muere nunca.
En los nueve minutos que dura el capítulo, Bluey nos deja con dos claves importantes para entender el procesamiento de la pérdida en los niños:
- Los niños y las niñas no comprenden todo a la primera y probablemente haya que hablar con ellos varias veces sobre el mismo tema.
- El juego es una de las herramientas a través de la cual los y las menores procesan su realidad.
Para saber más sobre la atención del duelo infantil, podéis acudir a nuestro servicio gratuito de Psicoterapia de duelo infantil, solicitar que impartamos una charla gratuita para padres y profesores en vuestro centro educativo (a través de este proyecto) o descargar gratis nuestro manual práctico “Hablemos de Duelo”, que ofrece pautas para ayudar a los adultos a hablar de la muerte con los niños y da claves sobre cómo viven el duelo los menores según su edad.
También incluye un apartado sobre cómo atender el duelo en el colegio y cómo ayudar a afrontar el duelo a las personas con discapacidad intelectual. La guía está disponible gratuitamente para su descarga en nuestra página web: