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Cómo acabar con el tabú social en torno al duelo

Sara Losantos, psicóloga de FMLC

 

© MalagónEl papel de la sociedad en el duelo ha variado mucho históricamente. Antes, cuando se producía un fallecimiento, el entorno, el vecindario, la familia, tenían un papel mucho más protagonista en el duelo del que tienen ahora.

Hoy en día, la forma de vivir el duelo es más solitaria, menos participada en sociedad. Sin embargo, el papel de la sociedad es protector: apoya y acompaña al doliente, y puede favorecer la evolución positiva de su proceso si le proporciona los mensajes adecuados.

El tabú social en torno a la muerte

Lamentablemente, vivimos en una sociedad que se avergüenza de la tristeza de los individuos que forman parte de ella, que teme a las emociones que expresan, que censura el miedo, el enfado y la tristeza, y promueve la alegría continua, aunque esté injustificada.

Eso hace que la sociedad envíe a los dolientes un mensaje subliminal en relación a la tristeza, el enfado, el miedo o la culpa en el duelo, que consiste en que, si el duelo dura más de lo que está “socialmente aceptado” se está convirtiendo en algo enfermizo, patológico e intolerable.

Sin margen ni espacio para las mal llamadas “emociones negativas”, el duelo se encapsula, se prolonga y se bloquea. Paradójicamente, el duelo se complica en un intento de acelerar su superación. El juicio o la valoración que hace la sociedad sobre la duración del duelo es lo que lo patologiza.

Nuestro papel en el tabú sobre el duelo

Pero la sociedad no es un ente abstracto ni una entidad sin vida, la sociedad somos todos y cada uno de nosotros, y aunque haya una corriente en el sentido que indicábamos antes, cada vez somos más los que leemos, los que sabemos que las emociones necesitan un espacio para poder deshacerse, que siguen un ciclo que no debe interrumpirse, que cumplen una función y no se pueden evitar.

Es mejor plantear opciones que protestar. La sociedad tiene una tendencia patológica a evitar lo que le asusta, pero podemos invertirla, y cada uno de nosotros tiene capacidad para cambiar una pequeña parcela de este tabú.

Actitudes inadecuadas de la sociedad de cara a los dolientes

  • ● Reñirles por estar tristes y decirles que tienen que ser fuertes.
  • ● Hacer comentarios simplistas como: “Es mejor así” o “Todo sucede por una razón”.
  • ● Hacer profecías como: “Ya verás cómo esto se te pasa” o “El dolor te acompañará para siempre”.
  • ● Hablar en lugar de escuchar.

Actitudes adecuadas de la sociedad  de cara a los dolientes

  • Difundir mensajes apropiados para las personas en duelo y hacerlos propios. Por ejemplo: “Me preocupa no saber darte el apoyo que necesitas por no saber cómo hacerlo, así que, si se te ocurre algo que esté en mi mano para ayudarte a vivir mejor el duelo, házmelo saber”.
  • ● Ante una persona que está impactada o que está sufriendo ante la pérdida, transmitirle el mensaje: “Es normal que llores, o que te sientas enfadada. Llora y enfádate todo lo que necesites”.
  • ● Cuando una persona pregunta cuánto va a durar el duelo, hay que responder que no hay ningún tiempo concreto para elaborar el duelo y tampoco hay ninguna prisa.
  • ● Ante las dudas acerca de cómo superar el duelo, explicarles que no hay una forma buena ni una forma mala de elaborar el duelo, se trata de seguir el instinto de cada uno.
  • ● Ante la sensación de impotencia de los parientes o amigos del doliente, expresarlo y decir algo como: “Me gustaría poder hacer algo más por ti, pero seguramente lo único que puedo hacer es darte un abrazo o hacerte saber que estoy ahí”.
  • Difundir información de calidad sobre el duelo y contribuir a la sensibilización de la sociedad sobre la atención a los dolientes.

Todas estas reflexiones se basan en la experiencia profesional de nuestros psicólogos con pacientes en duelo y en los comentarios recibidos en este blog durante los últimos dos años. Estas claves pretenden servir de orientación a las personas que han sufrido la pérdida de un ser querido o intentan ayudar a una persona doliente de su entorno. Para saber más o para solicitar ayuda psicológica gratuita, no dude en consultar nuestra página web:

   www. fundacionmlc.org

 

3 comments


  1. mirta

    me gustó mucho este artículo.


  2. liliana

    perdi a mi hijo en un accidente dudoso. no puedo aceptarlo y me pregunto por que? me siento muy debil.


  3. Querida Liliana:

    El duelo es un proceso muy duro y la aceptación es una de las tareas más complejas. En el proceso de aceptación nos topamos con tener que asumir aspectos de la muerte que no son lógicos, que nos dejan desarmados y que parece que no entran en la cabeza y eso es muy duro. Frente a esta incertidumbre que deja el duelo, ayuda que hables de todo esto con tu entorno, con tu familia, con buenas amigas… Que aunque parezca que nada te ayuda y consuela, permitas que los de alrededor estén a tu lado. Uno de los ingredientes más necesarios en el duelo es la paciencia y saber que el duelo duele. La sensación de debilidad es normal, es un proceso muy intenso que requiere de mucha energía.
    Cuídate mucho, Liliana, y mucho ánimo.
    Un abrazo,

    Pilar Pastor
    Psicóloga FMLC

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